Ana Martínez Sánchez

Participante del viaje de estudio a Japón en Octubre del 2007
Informe escrito en Barcelona en Diciembre del 2007

    1. IMPRESIÓN DE JAPÓN A TRAVÉS DE LA EXPERIENCIA DEL VIAJE DE ESTUDIO A JAPÓN

Como mencionaba otra de mis predecesoras en este viaje de estudio a Japón en el 2005, Ana Isabel Goepner Meléndez, yo también era una chica normal, con una vida normal y unos gustos normales, y entre ellos está Japón, normal también.

Ya de muy chiquita (como todos los niños) recibí una gran influencia de las series de televisión japonesas Heidi y Marco. Con unos pocos años más, fui fan de Candy-Candy. Con la creación de TV3 y de programación específica para niños, no me perdí los grandes éxitos japoneses como Bola de Drac (el entrañable Songoku de Dragon Ball) y Arale (la niña-robot del Dr. Slump). Ya de quinciañera, tuve como profesora de piano a una de las mejores profesoras de piano que podría haber tenido, a una japonesa, que no se sabe muy bien, aterrizó unos años antes en Teruel, y de ahí saltó al Conservatorio de Música del Liceo en Barcelona, donde hemos tenido el placer de tenerla como profesora. Allí empezó un descubrimiento mayor del Lejano Oriente, con unas clases de piano en las que el lenguaje entre profesor y alumno no era el lenguaje verbal, sino el de la música y el de “dar color” a la música de Debussy, Chopin o Listz. Allí los alumnos también descubrimos la energía de la música para piano del compositor Ryuichi Sakamoto. Por otro lado, siendo quinciañera, mi afición a la fotografía me adentró en el mundo de la tecnología y en el mundo de Minolta. Y siguieron pasando los años, y lo de Japón se ha ido convirtiendo en una moda, cada vez más fuerte y más presente por todas las ciudades europeas. Cada vez hay más restaurantes japoneses, y tiendas que nos acercan Japón de alguna manera, como las tiendas MUJI, hay películas y festivales de cine asiático, y el cómic manga japonés se está convirtiendo en un movimiento para los “urbanitas más vanguardistas”. Tal vez más reciente, tenemos el fenómeno literario Haruki Murakami, sobretodo desde que se ha traducido al castellano y al catalán, y entre los que hemos empezado a leer alguno de sus libros (Tokio Blues, Kafka en la Orilla) nos ha creado una verdadera adicción. Dentro de todo este movimiento, hace un par de años sí que viví algo fuera de lo normal. La Caixa y British Council me otorgaron una beca de estudios de postgrado en Reino Unido para la Gestión de Organizaciones Culturales (y así tratar de aúnar mis estudios de gestión de empresas y mi vocación musical-artística) y en Londres, maravilloso escaparate de culturas de todo el mundo, tuve la ocasión de descubrir el teatro tradicional japonés Kabuki, los tambores tradicionales nipones Taiko, las pagodas en los maravillosos Kew Gardens, la fotografía irreverente del japonés Araki, etc. Japón ya no es sólo un referente puntero en innovación tecnológica, es también un potentísimo creador de contenidos de todo tipo muy influyentes en la vida moderna de los occidentales. En Japón se está desarrollando una industria cultural muy fuerte y está despuntando en ciudades a las que se puede considerar capitales cosmopolitas del mundo.

Y de repente, como entiendo también les ha sucedido a mis predecesores, este viaje de estudio ha supuesto algo realmente fuera de lo normal por lo que nos sentimos profundamente agradecidos. Viajar a Japón ha sido para mí un encuentro entre el pasado y el futuro. Por un lado un encuentro entre el pasado de Japón (con sus templos, palacios, castillos, jardines centenarios y leyendas milenarias) y el futuro de Japón (los vibrantes barrios de Tokio como el elegante y moderno Ginza, el barrio vanguardista de Shibuya, el céntrico Shinjuku y el popular barrio Harajuku ahora de moda entre los jóvenes). Por otro lado de alguna manera también un encuentro entre mi niñez (esas imágines de dibujos animados con coches de policías que saludaban a Arale, y la “Hello Kitty”) y mi presente-futuro (soy urbanita, y en Tokio no dejas de tener la sensación de estar viviendo la película de “Lost in Translation” de Sofía Coppola).

Han sido unos días en los que creo hemos redescubierto el placer de apreciar los detalles (Ikebana, Ceremonia del Té, pasear descalzo por las tarimas de los templos sintoistas y budistas), de contemplar la naturaleza (jardines, lagos, montañas, pinares), y de sentirse muy bien recibido por todos los japoneses que hemos conocido. Han sido unos días para compartir experiencias con un grupo de 30 europeos y dos guías excelentes (Harue-san y Yoko-san), unos músicos Nagisa Taiko encantadores, unas familias de acogida en Hiroshima maravillosas (en especial mi familia Kiyosaki), y con otras tantas personas que hemos ido conociendo.

Han sido dos semanas muy intensas, que nos han mostrado parte del maravilloso Japón, pero yo creo que todos somos conscientes de que hay mucho todavía por ver, y que en algún momento volveremos para continuar conociendo el País del Sol Naciente.

    2. CÓMO MANTENDRÉ A PARTIR DE AHORA LAS RELACIONES CON JAPÓN

Este viaje nos ha permitido desmitificar la imagen típica del hombre de negocios japonés. Por supuesto existe, pero después de estar allí, y de compartir un día con una familia japonesa, otra noche con los músicos Nagisa Taiko, y conferencias y charlas con representantes de diferentes organismos oficiales y estudiantes universitarias, y de salir un poquillo de noche por Shinjuku, entendemos mejor lo importante que es la apreciación de los detalles, que hasta con el silencio puede haber comunicación si uno quiere (según la filosofía zen) y que los japoneses también tienen maneras muy sanas de divertirse.

En mi actual trabajo, una editorial de cómics (y manga) y de coleccionables en cualquier tipo de soporte (libro, DVD, gadget) con distribución en el canal quiosco, los contenidos japoneses siempre han tenido un lugar especial. Hace más de quince años que se publica manga (Dragon Ball es uno de los mayores éxitos), y en los últimos años hemos hecho hincapié en la literatura asiática (“Biblioteca Oriental” que incluye autores prestigiosos japoneses como Kawabata o Mishima) y en el cine de anime para todos los gustos (con una selección de los 32 mejores títulos de DVD, que incluye la oscarizada película “El viaje de Chihiro” de Hayao Miyazaki). Aquí adjunto unos links a ejemplos de diferentes colecciones comercializadas por Editorial Planeta DeAgostini:

Colecciones de manga japonés Dragon Ball: http//:planetadeagostini.es/coleccionable/dragon-ball-28ultimate-edition29---octubre-2007.html
Dectective Conan:http//:www.planetadeagostini.es/coleccionable/detective-conan---agosto-2007.html
Colección de libros de Literatura Oriental http://www.planetadeagostini.es/coleccionable/biblioteca-oriental---enero-2006.html
Colección de DVDs de Anime Japonés http://www.planetadeagostini.es/coleccionable/anime-dvd---septiembre-2006.html

Este viaje de estudio a Japón de entrada me va a permitir contextualizar mejor mis estudios de productos japoneses en el mercado español, tanto de cómics como de nuestros productos coleccionables para el canal quiosco

Por otro lado, si en algún momento asumiese funciones de negociación dentro de la editorial, podría desenvolverme mejor en el entorno nipón. Por último, si dentro de mi carrera profesional evolucionase hacia temas de organizaciones aún más culturales, mi interés por producciones japonesas tanto de música como de artes visuales sigue siendo altísimo.

En el entorno personal, continuaré alentando a mis amigos y conocidos para que dentro de lo posible viajen y conozcan Japón, y para que desde aquí descubran artes como el Ikebana o la Ceremonia del Té, asistan a conciertos de Taiko, disfruten de la nueva literatura contemporánea japonesa de Murakami o vayan a exposiciones interesantes como la organizada actualmente en Barcelona en la Fundació Miró sobre “KAWAII. EL JAPÓ ARA”.

    3. OPINIÓN SOBRE LAS RELACIONES GENERALES ENTRE JAPÓN Y EUROPA DE AHORA EN ADELANTE

En este viaje el gobierno japonés ha hecho un gran esfuerzo invitando a representantes de prácticamente todos los países europeos. En este viaje tan fructífero, nos hemos sentido invitados de lujo y ha sido para todos nosotros un verdadero placer. Adicionalmente, al ser más jovencillos, la visita al Memmorial Peace Museum de Hiroshima nos ha permitido recibir una lección de historia sobre las barbaridades que han llegado a ocurrir, y que para lograr el desarme nuclear se requiere de gran constancia y de dotes diplomáticas.

Japón también muestra su preocupación por el medio ambiente, y espero que nuestros representantes europeos no dejen escapar esta oportunidad para lograr acuerdos muy significativos que logren frenar el calentamiento global y reducir la contaminación que desgraciadamente a veces va pareja al desarrollo económico.

En cuanto a la influencia de Japón en Europa, esta continuará con contenidos tan atractivos como los que ya se están produciendo de manga, anime o videojuegos y las nuevas tecnologías (web 2.0, blogs, youtube, facebook) permitirán intercambios aún más veloces entre los ciudadanos de a pie.

Esperemos que Europa no se nos duerma y que seamos capaces de crear contenidos interesantes también para Oriente, permitiendo así un enriquecimiento mútuo.

    4. AGRADECIMIENTOS

No quiero acabar mi informe sin antes mostrar nuevamente mi profundo agradecimiento a las siguientes instituciones y personas:

    5. UNA FOTOGRAFÍA